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Una revista llena de Claretianos. El número de diciembre de Ventana Europa rebosa de referencias a la Congregación
VENTANA EUROPEA, la revista de las Misiones Católicas de Lengua Española en Europa, concede este mes un interés singular a los Misioneros Claretianos y sus actividades.
No se cae de las manos, si no todo lo contrario. Es atractiva: buen papel, imágenes frescas, color, temas de interés… Poco más de treinta páginas bien aprovechadas. En el número de diciembre la portada ya habla de Misioneros Claretianos. Y de Misioneros Claretianos conocidos: se anuncia una entrevista con Anthony O. Igbokwe (para muchos, Obi), el nuevo Superior de la Comunidad que nuestra Provincia de Santiago tiene en Zürich.
Entrevista con Anthony O. Igbokwe
La entrevista ocupa dos páginas; es ágil de leer. Acompañan el texto dos fotos de Anthony, incorporado a la Misión de Zürich tras concluir su licenciatura en Teología. La revista destaca sus palabras sobre la emigración como riqueza para la sociedad. En el texto aparecen otros muchos temas: no sólo es la sociedad la que puede enriquecerse con los inmigrantes; también la Iglesia: “merced a la emigración muchas Iglesias Europeas -comenta- se están rejuveneciendo”. Preguntado sobre su destino y disposiciones, Anthony es claro: “vengo a servir a los emigrantes como hermano suyo con mi capacidad de sacerdote misionero”. Ser claretiano es “ser servidor de la Palabra en todos los sentidos”.
Varias presencias más
Pero no es la de Obi la única presencia claretiana. Ventana Europea dedica también dos páginas a otro Misionero: José Manuel Iparraguirre, de la Provincia de Euskal Herria, que tras casi treinta años al servicio de los inmigrantes en Europa marcha ahora a Venezuela. En el interesante relato en que da cuenta de su experiencia, José Manuel habla de la Misión de Rue de la Pompe de París: “el lugar más cargado de historia de emigración española en Europa”.
Por si fuera poco, el director de la revista, José Antonio Arzoz, agradece personalmente su servicio a la publicación y al mundo de la emigración a Iparraguirre, Pilar Samanes (religiosa de la Congregación de Santa Ana) y a Gumersindo Martín (Sindo) -“claretiano de pro” señala- incardinado este año a nuestra Provincia e incorporado hace unos meses a la comunidad de Valladolid. Su compromiso, señala Arzoz, “ha servido para que en la redacción siempre tuviéramos en cuanto todo aquello que era reivindicativo para los emigrantes”.
La presencia claretiana en este número de Ventana no acaba aquí. Aún hay espacio para presentar y alabar la página web de nuestra Misión de Zürich: www.misioncatolica.ch. El elogio es claro: “todo un acierto de los claretianos de Zürich, que una vez más se ponen al día para servir lo mejor posible a los emigrantes”.
Tiempo de animarse
Hace unas semanas, Juan José Raya, Prefecto de Apostolado, y Jesús A. Centeno, Secretario de Medios y Nuevas Tecnologías de Santiago, escribían a las comunidades claretianas invitando a suscribirse a Ventana Europea y a difundirla. Está claro que nos puede enriquecer: ¿qué son para muchos de nosotros doce euros anuales?
Alguien puede decir que hay ventanas hechas para estar cerradas. No es el caso. Abrir la puerta a Ventana Europea refrescará nuestra vida misionera y nos ayudará a tejer lazos con grupos y personas que necesitan apoyo y cercanía: ¿alguien no tiene doce euros?
Pedro Belderrain