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Colmenar, capital por unos días de la Europa Claretiana
La casa claretiana de Colmenar Viejo (Madrid-España), en la que habitualmente residen casi cincuenta Misioneros, se ha ensanchado estos días para recibir a laicos y claretianos procedentes de otras seis naciones europeas. El encuentro de los ‘provinciales’ de la Congregación en Europa abrió la puerta a una serie de reuniones en las que participaron los coordinadores continentales de apostolado y cerca de treinta personas vinculadas con el mundo de la cooperación internacional, el trabajo en temas de justicia, paz e integridad de la creación, la acogida a migrantes y refugiados, la educación en valores y el fomento del desarrollo integral.
Los superiores mayores de las provincias y delegaciones de Alemania, Polonia, Cataluña, Euskal Herria, Fátima (Bética, Portugal y Reino Unido-Irlanda) y Santiago celebraron jornada y media de trabajo, en la que se dedicó gran parte del tiempo a reflexionar sobre la misión claretiana en Europa. La asamblea ha sido la novena de una serie iniciada en Inglaterra en 2013: los ‘provinciales’ de los Misioneros Claretianos en Europa tratan de encontrarse al menos una vez al año. Esta vez, dando pie a un precedente que volverá a repetirse, han compartido varias sesiones de trabajo y momentos de oración y celebración con los coordinadores continentales del apostolado.
La presencia claretiana en Europa es muy diversa y se plasma a día de hoy en catorce naciones de modo muy diverso: parroquias urbanas y rurales, templos, centros de espiritualidad, colegios, centros de pastoral social y acogida de refugiados, programas en favor de personas en exclusión, editoriales, revistas, servicios de atención a la vida consagrada, colegios mayores universitarios, equipos itinerantes de animación pastoral, medios de comunicación…
En los últimos años algunas regiones claretianas vinculadas durante décadas a organismos europeos han empezado a organizarse autónomamente, como la delegación de Angola y Sâo Tomé e Principe. Las comunidades de Sri Lanka se desvincularán pronto de la provincia claretiana de Alemania. Otras comunidades, como las de Burkina Faso, Costa de Marfil o Zimbabwe seguirán de momento ligadas a organismos claretianos europeos.
