Ser llave y luz para seguir dando pasos entorno a la pastoral juvenil +18

Hará año y medio que se pusiera en marcha, tras meses de dedicación y esfuerzo, una de las prioridades misioneras del Equipo de Pastoral de los claretianos de Santiago (EPAP). Fue entonces cuando la provincia, mirándose en el espejo del Sínodo de los Jóvenes convocado por el papa Francisco, echó a andar su propio proceso renovado de acción pastoral con los mayores de 18 años, iniciando así la fase previa del proyecto Fórum. De tal modo, al igual que en la Iglesia católica se vivió un proceso sinodal con tres momentos (un pre-sínodo, los días de encuentro propiamente dichos y una etapa post-sinodal) el EPAP quiso recorrer un camino similar, contando para ello con un grupo dinamizador del proyecto formado por jóvenes y claretianos, y adaptando de esta manera las mismas tres etapas a su medida. Los ecos de los participantes del pre-fórum y de los días de encuentro hablaban de compartir y profundizar en la dimensión sinodal del trabajo de nuestros pastoralistas y expertos. El relato de los jóvenes confirmaba también entonces que Fórum estaba siendo un proyecto acertado, que transpiraba cambio y transformación en sus propios caminos de fe. Pero llegó el dichoso coronavirus, la crisis sanitaria y las semanas de confinamiento para poner todo este trabajo patas arriba. La pregunta en el EPAP fue inmediata. ¿Qué va a pasar con el Fórum?

Adolfo Lamata, Coordinador del Equipo de Pastoral, explica estos días que “somos conscientes que no será fácil reactivar la pastoral de Jóvenes +18, pero no queremos dejar de compartir la importante experiencia del Fórum”. Lamata pone de relieve la etapa vital de los participantes, subrayando que a partir de sus contextos, situaciones y experiencias personales “nos lanzaron grandes retos a nuestra pastoral juvenil”. Fueron preguntas e interpelaciones formuladas “casi por necesidad” y que encontraron, gracias a la estructura del Fórum, un espacio donde plantearse.Allí, la reflexión giró en torno a tres líneas guía: qué no querríamos tener en pastoral juvenil, qué sueño con encontrar y qué seguir consolidando. Los jóvenes, se ha dicho mucho, piden más presencia en la Iglesia, “y nosotros, desde el EPAP, hemos recogido todo lo que han expuesto, y vamos a convertirlo en un vídeo corto y en una pregunta que pueda ser pensada entre todos”, resume Lamata.

La intención es clara: que pese al confinamiento, todos puedan seguir el hilo, que nada se pierda y que siga generándose diálogo. Así “los próximos viernes compartiremos un vídeo en cada uno de nuestros perfiles de Facebook, Twiter, Instagram”. “Ya sabes cómo nos ha ayudado internet en estos días para seguir conectados”, apostilla el misionero Jorge Ruiz Aragoneses, integrante del EPAP. Él mismo ha querido completar el trabajo de estos días montando un blog en tiempo récord, bautizándolo con el nombre de “Llave y luz”. “Nos gustaría poder ver escritas en esta nueva bitácora vuestras opiniones y comentarios. Queremos que sea un espacio abierto tanto para claretianos, como para los jóvenes”, completa. Que todos lo conozcan y que todos estén dispuestos a volcar opiniones que nos ayuden a avanzar. “Usaremos este blog hasta que sea posible retomar las reuniones locales”, finalizan. Llave para abrir nuevas puertas y luz que ilumine y abrase, dejando que Dios actúe a su modo, y prestándole oídos mientras tanto.