“Tahanan”, la Capellanía Filipina de Madrid asentada en la parroquia Nuestra Señora del Espino, es recibida en audiencia privada por el papa Francisco

Oficina de comunicación de los Claretianos de Santiago – Vatican News | “Tahanan”: esta palabra que se traduce por “hogar” es el nombre de la misión de la Capellanía Filipina de Madrid asentada en nuestra parroquia Nuestra Señora del Espino, y a cuyos integrantes recibió el papa Francisco en audiencia privada en el día de ayer, lunes 16 de diciembre por la mañana. El P. Jorge Domínguez, al frente de la parroquia, lleva años conviviendo y compartiendo actividades y proyectos con la comunidad de este país asiático, y por ello no dudó en acoger este viaje “como un hermoso regalo no esperado”.

El Santo Padre, en un hondo discurso dirigido expresamente a ellos, les confesó que la advocación de la virgen titular de nuestra parroquia de la zona de Plaza Castilla le ha hecho pensar en tantas personas migrantes que lejos de encontrar ese hogar cálido y acogedor se topan con infinidad de dificultades e incomprensiones que se alzan como un espino contra ellos. “Sobre estas espinas, -añadió el obispo de Roma-, nuestra bendita Madre se nos presenta para que no perdamos la esperanza y seamos capaces de enfrentar los problemas, confiados en su protección y amparo”. En este sentido, y una vez finalizada la audiencia, Jorge Domínguez recordaba estas palabras añadiendo que “al pronunciar aquella parte de su discurso pensé allí y para mis adentros que si alguien resulta verdaderamente y para toda la Iglesia un testigo de esperanza, ese es él mismo, el Papa Bergoglio”. “Un hombre que cumple 88 años y sufre los achaques propios de su edad, pero que transmite toda la fuerza y las ganas de seguir adelante”, reconoce el misionero.

“La casa de Pedro es para ustedes un hogar también”

Por otra parte, el Pontífice subrayó que “la Iglesia para nosotros siempre es un hogar, un hogar cálido, acogedor, y hoy la casa de Pedro es para ustedes como un hogar también”. Y a renglón seguido, recordó a san Lorenzo Ruiz, santo filipino: “San Lorenzo es una figura muy hermosa, pues por un lado nos habla de integración de culturas”. “Su familia, como la del Card. Tagle, tenía ascendencia china y filipina y, junto a la española que le dio la fe, creaban un excelente mestizaje”, explicaba Bergoglio.

El Sucesor de Pedro subrayó de la figura de san Lorenzo que “tuvo que abandonar su tierra debido a la injusticia, en su caso una difamación, como muchas personas que todavía hoy se ven obligadas a emigrar para salvar sus vidas o buscar un futuro mejor. Finalmente, al llegar a la tierra que debería haberle acogido, Dios le pidió testimoniar su fe con la prueba del amor más grande, que fue entregar su vida”.

El Papa añadió que guarda “dos recuerdos lindos” de su visita a su Filipinas, que tuvo lugar en enero de 2015, y evocó "los siete millones en la misa de Manila”. “Y después, la Misa en Tacloban, con la lluvia, los vientos, que tuvimos después que salir corriendo porque venía un vendaval y si no, no podíamos salir", relató el Pontífice.

Francisco consideró que “los filipinos son hombres y mujeres de fe” y comentó que en el Vaticano trabajan distintas personas de ese país: “Es genial la fe que tienen, el testimonio que dan”. Por su parte, la Capellanía Filipina quiso obsequiar al Santo Padre con dos libros, el del 30º aniversario de Tahanan, por un lado, y con ‘Palabra y Vida 2025’, novedad de nuestra editorial Publicaciones Claretianas. “Fue precioso ver cómo Menci Molina, una auténtica institución en la Capellanía, le entregaba a Francisco el libro de los evangelios de cada día, cuya edición hemos personalizado, añadiéndole una cubierta especial para las parroquias Nuestra Señora del Espino y Nuestra Señora de Madrid, y, cómo no, para Tahanan”, comenta orgulloso el claretiano. Antes de despedirse, el grupo al completo no pudo resistirse y felicitó espontánea y anticipadamente a Francisco por su 88º cumpleaños.

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