ENCUENTRO DE PASTORAL INFANTIL

Del 8 al 10 de abril, tuvo lugar en Colmenar Viejo (Madrid), el I Encuentro de Responsables de Pastoral Infantil de la Confederación

Asistieron seglares y religiosos de las tres Provincias. Alrededor de treinta personas, nos encontramos, en estas magníficas instalaciones. El saludo de algunos claretianos, pertenecientes a distintas provincias, que no se veían desde hacía veinte años, nos produjo una fuerte carga de emotividad. Estos encuentros sirven y dan mucho más que los objetivos planteados ¡Merecen la pena!
El trabajo se vertebró en tres aspectos:

• Reflexión sobre los criterios fundamentales de la PIJV.
• Información sobre la pastoral infantil en los colegios y parroquias de la Confederación.
• Presentación de nuevas experiencias, unas encaminadas a parroquias y otras a colegios.

Tuvimos como ponentes a Antonio S. Orantos cmf, que disertó acerca de las "Claves fundamentales en la pastoral infantil", a Mª José, Teresiana, a Pedro, Jesuita y a Patxi, madre de familia. También Michel ensayó prácticamente un "Taller de oración", en el que los adultos "ejercieron" de niños. ¡Y vaya si lo lograron! Calificación de las experiencias: sobresaliente "Cum laude".
Hubo también amenos y fructuosos diálogos y puestas en común. Todos tomamos nota de cara a nuestro trabajo pastoral con niños y jóvenes, dándonos perfecta cuenta de la importancia de la pastoral Infantil.
No es la escasez de vocaciones la que obliga a revisar el tipo de pastoral. Es el cambio social el que exige una pastoral compartida con todos los cristianos. La pastoral de evangelización requiere que nuestra religiosidad se oriente hacia la conversión personal, que suscite mayor y mejor participación en la Iglesia, en la sociedad y por tanto en nuestras parroquias y colegios.
El evangelio del domingo (Emaús), fue muy significativo: no solo señala unos destinatarios para la misión, sino que indica el lugar donde los evangelizadores con carisma claretiano deben vivir, estar y celebrar. Formar personas capaces de vivir de acuerdo con lo que celebran, es nuestra tarea evangelizadora.