Días de especial gozo para la Provincia

Nuestra Provincia Claretiana de Santiago ha vivido en los últimos días varios acontecimientos especialmente gozosos. El escenario, ubicado algo lejos del corazón físico de la Provincia, pero bien cerca de corazones más importantes, ha sido la ciudad rusa de Krasnoyarsk, en el centro geográfico de Siberia.

Nuestra Provincia Claretiana de Santiago ha vivido en los últimos días varios acontecimientos especialmente gozosos. El escenario, ubicado algo lejos del corazón físico de la Provincia, pero bien cerca de corazones más importantes, ha sido la ciudad rusa de Krasnoyarsk, en el centro geográfico de Siberia.

Los días 10 y 11 de octubre fueron los elegidos para que Andrei N. Andreichenko, estudiante de nuestra Provincia de Santiago, hiciera su profesión perpetua y fuera instituido como lector y acólito. Es la primera vez, como señalaban los fieles de Krasnoyarsk, que un siberiano, viviendo en esta ciudad y “hablando ruso sin acento” proclamaba públicamente su deseo de ser un buen Misionero Hijo del Corazón de María hasta el final de sus días.

Andrei, nacido en el mismo Krasnoyarsk hace treinta y seis años, fue bautizado a los diecinueve años y se sintió atraído por la Congregación conociendo a la comunidad claretiana que desde 1991, dependiendo del Gobierno General, atiende aquella amplia región siberiana, a la que estuvo encomendado pastoralmente un territorio casi cinco veces más grande que España. Tras casi doce años de experiencia formativa claretiana, vividos en Rusia y España (en Los Negrales y Colmenar Viejo), Andrei -que había hecho su primera profesión el 11 de febrero de 2003- comenzó hace unos meses su preparación para la profesión perpetua, tras licenciarse en Teología Espiritual en la Universidad Pontificia Comillas y ser destinado a Krasnoyarsk.

Las dos iglesias católicas principales de la ciudad han acogido las celebraciones. El sábado 10 en la Iglesia de Sólnechnii se celebró la colación de ministerios. El domingo 11, con una notable presencia de la comunidad católica, la Iglesia de la Transfiguración del Señor acogió la profesión, que fue recibida por el P. Manuel A. Tamargo, Superior Provincial, desplazado hasta allí para la ocasión.

Andrei, acompañado en la oración por las comunidades de la Provincia especialmente por la de Colmenar que durante años fue su hogar, ha estado también físicamente acompañado por un buen número de hermanos: sus hermanos de Krasnoyarsk; el P. Juan E. Sarmiento, desplazado desde Murmansk; los claretianos de origen polaco que atienden los núcleos de Atchinsk y Bratsk, y los PP. Alejandro J. Carbajo y José María Vegas, llegados desde San Petersbursgo. Estos dos últimos aprovecharon el viaje para impartir varias conferencias invitados por la Universidad Federal Siberiana.

Enhorabuena a Andrei y gracias por su generosidad. Su profesión es una hermosa ocasión para agradecer la búsqueda y el compromiso cristiano del resto de los jóvenes en formación de la Provincia que -repartidos por el mundo- cuidan su preparación en San Petersburgo (Rusia), Córdoba (Argentina), Cochabamba (Bolivia), Granada, Colmenar Viejo y Madrid-Vallecas (España) y Lambaré e Yhú (Paraguay). A ellos se unen, encomendados al cuidado de Santiago, los jóvenes de otros organismos claretianos que se preparan en nuestras comunidades. Que en este mes de octubre, tan misionero, el Espíritu aliente sus sueños, fortalezca su fe y nos ayude a los demás Misioneros a darles cada día mejor ejemplo.