Colegio Claret Fuensanta, con los menores que viajan en el ‘Aquarius’

Tras conocer la situación del barco “Aquarius”, detenido en el Mediterráneo durante varios días con 629 personas migrantes a bordo, y recibir con enorme esperanza la propuesta del alcalde de Valencia, Joan Ribó, de ofrecer nuestra ciudad como lugar de acogida, el Colegio Claret Fuensanta, fiel aliado del compromiso social y de iniciativas solidarias nutridas de una sensibilidad especial hacia los sectores más desfavorecidos, se ha movilizado para diseñar estrategias que minimicen con urgencia los efectos de esta crisis humanitaria. La respuesta no se ha hecho esperar.

En sendas cartas enviadas al asesor de asuntos generales de don Vicent Marzá, Conseller de Educación, y al mismo alcalde valenciano, este centro educativo se ha ofrecido en masa –tanto el claustro de profesores como la Asociación de Familias del centro- a agilizar la bienvenida y escolarización de estos niños y niñas abocados a una ventura terrible por la injusticia y la desesperanza. Están estudiando, además, la posibilidad de ofrecer, a través del proyecto educativo 'Corazón de María', clases de inmersión lingüística a los más pequeños durante el mes de julio.

El Colegio Claret Fuensanta de Valencia es un centro que desde sus inicios, allá por el año 1959, siempre ha desarrollado una ingente labor social junto a los más débiles y, con la entrada del nuevo milenio, esta tarea ha concebido un compromiso de abnegación aún mayor con la recepción de inmigrantes de casi todos los continentes. Sus años de experiencia en la acogida e integración le han situado como referente indiscutible en la adaptación multicultural de la ciudad. De hecho, se sitúa en un barrio en el que un quinto de la población procede de otros países. Esta labor contará con la ayuda de Fundación PROCLADE, la ONGD promovida por los Misioneros Claretianos, con delegación en Valencia.