Una Semana Nacional de Vida Consagrada con muy buena pinta

Los medios de comunicación van levantando acta. Cantidad de citas deportivas, culturales y festivas han sido canceladas o aplazadas a fechas que aún no se han conocen. Se habla de Olimpiadas, del Tour de Francia, de los grandes campeonatos de tenis…

Del 16 al 18 de abril Madrid habría tenido que acoger de nuevo una de las citas principales de las que se ha acostumbrado a disfrutar la vida consagrada española. A punto de llegar a su edición número cincuenta, prevista para 2021, el Instituto Teológico de Vida Religiosa había diseñado un menú realmente digno de una gran fiesta. Tras escuchar al Nuncio de Su Santidad en España y al presidente de la comisión episcopal para la vida consagrada, Mons. Luis Ángel de las Heras (CMF), los participantes habrían seguido profundizando en la reflexión de la mano de personas llenas de experiencia en el pensamiento y la puesta en práctica, a pie de obra, de la misma vida consagrada.

 Con un título de actualidad difícilmente superable: Consagrados para la vida del mundo. La vida consagrada en la sociedad actual, la reflexión se habría ido preguntando por los valores imperantes en el mundo de hoy, el seguimiento de Cristo en estos tiempos, el diálogo permanente entre Iglesia y sociedad, la espiritualidad de la vida consagrada o el diálogo inter-cultural e interreligioso. Al Cardenal A. Bocos, todo un habitual en las jornadas, se habrían unido el Arzobispo de Madrid, D. Carlos Osoro, que no ha dejado de participar en los últimos años, y los cardenales españoles Cristóbal López (SDB), arzobispo de Rabat, y Miguel Ángel Ayuso (MCCI), presidente del consejo pontificio para el diálogo interreligioso.

Representantes de los principales órganos de comunión y coordinación de los religiosos y miembros de institutos seculares de España (Mª Rosario Ríos, Mª José Castejón, Jesús Díaz Sariego, Juan Carlos Pérez Godoy) iban a compartir micrófono con la presidenta de la Unión Internacional de Superioras Generales (la claretiana Jolanta Kafka), la superiora general de las Hermanas de la Caridad de Santa Ana (Carmen Mora) y claretianos con reconocida competencia en sus campos de estudio, investigación o animación de la vida consagrada como Gonzalo Fernández, Manuel J. Arroba, José María Vegas y Carlos Martínez Oliveras, director del Instituto de Madrid.

Los cuidados momentos de oración y celebración de la Eucaristía previstos para cada día iban precedidos en la jornada central por un diálogo singularmente atractivo que podría haber enriquecido a muchos españoles: el que, moderado por el conocido periodista Ángel Expósito, iba a reunir a D. Francisco Vázquez, eminente político de inspiración socialista y cristiana, embajador de España y exalcalde de La Coruña, con Mons. Luis Argüello, obispo auxiliar de Valladolid y secretario general de la Conferencia Episcopal Española.

Las semanas nacionales para los institutos de vida consagrada comenzaron a celebrarse, auspiciadas por el Instituto Teológico de Vida Religiosa de Madrid, en 1972, y han tenido siempre como marco la semana de Pascua. Sus ponencias y comunicaciones han ido siendo editadas en cuidados volúmenes en los que Publicaciones Claretianas ha agrupado una hermosa colección de intervenciones que sobrepasan ya el medio millar y que desplegadas dan hermosa cuenta de lo que ha sido el caminar de la Iglesia a la luz del Concilio Vaticano II.

En una nota difundida a mediados de marzo, el Instituto Teológico de Vida Religiosa de Madrid comunicaba la cancelación de la 49ª Semana, al tiempo que expresaba su oración por los difuntos provocados por la pandemia y sus familiares, manifestaba su cercanía a los enfermos y su solidaridad con los más vulnerables, su gratitud a todas las personas de bien que están haciendo frente a la enfermedad y expresaba el deseo de encontrarse pronto con sus habituales compañeros de camino en la reflexión y la formación.