Juan Garibi: “Buscamos realizar una actividad económica en beneficio de la comunidad que, como consecuencia de hacerla bien, pueda ganar dinero”

‘Viaje en globo’ emitió ayer el último programa de este año, 2022, y lo hizo hablando de economía, pero de una economía puesta al servicio de las personas y del planeta. Para ello, contó con la presencia de D. Juan Garibi, licenciado en Derecho con la especialidad de Ciencias Económicas. Se trata de todo un experto en el sector, que en sus primeros años desempeñó labores de asesoramiento y formación en materia económica para en Cáritas, hasta que en el 2005 impulsó la puesta en marcha de una banca ética en nuestro país.

Para Garibi, “toda actividad es susceptible de organizarse de formas diversas; la banca, también”. “Se puede desarrollar esta labor con el objetivo de ganar dinero, maximizando el beneficio a corto plazo, o no”, comenzaba explicando el experto. “Y tengamos claro que cuando lo que se busca es el beneficio, lo siguiente que hay que preguntarse es a costa de qué”, advertía.

Y explicando su modelo de negocio, en sintonía con los postulados de toda actividad empresarial que se lleve a cabo persiguiendo el interés económico de la sociedad, incidía en que “a nosotros nos ayuda pensar que somos una banca sin ánimo de lucro, si es que eso se pudiera entender”. Así, para explicarlo, Garibi continuaba diciendo: “Nosotros buscamos realizar una actividad económica en beneficio de la comunidad y que, como consecuencia de hacerla bien, pueda ganar dinero”. “Tales beneficios, además, los revertimos en la sociedad, y no lo distribuimos entre socios y accionistas”.

“Yo estoy orgulloso de pertenecer a la banca ética por lo que hacemos con el dinero. Porque puedes ver que hay gente que se está dejando la piel en sacar adelante iniciativas que buscan algo para los demás”, recalcaba.

El proyecto de la banca ética en España tiene nombre propio, FIARE, que es un acrónimo de Fundación para la inversión y el ahorro responsable, y que cumple ahora 20 años. Juan Garibi es su responsable comercial y de desarrollo estratégico. “Tuve la suerte de estar allí desde el inicio”, expresó. “La historia comenzó viendo cómo mediar, de la forma más humana posible, entre una necesidad y una disponibilidad”. Es decir, “cómo realizar la labor de un banco permaneciendo vinculado al territorio donde se halla, identificándose con la población a la que sirve”. De tal modo “encontramos en la banca ética de Italia un compañero de viaje que mantenía el mismo ideario de lo que nosotros queríamos implantar en España, y nos dijimos, vamos a hacerlo juntos”. Así, “somos la parte española del proyecto que opera en Italia”.

“Somos un proyecto, en cierto modo, político porque proponemos transformar la sociedad a través del uso del dinero de un modo distinto”, expresaba Garibi. Pero, al fin y al cabo, es un banco que opera en España y que forma parte del mismo marco que regula la actividad de otras entidades con las que el ciudadano medio está más acostumbrado a tratar. “Por supuesto que nos ajustamos a la normativa, pero también diré que no vamos contra ningún banco”, aclara. “Solo somos modelos distintos de negocio. El nuestro se basa en mantener la rentabilidad en el margen financiero, y no en otros productos, ni siquiera en comisiones”, explica. “Lo cual resulta entendible porque nuestros socios no piden dividendos. Además, nuestra plantilla es militante y la gente que confía en nosotros recibe una retribución en forma de lo que llamamos prima ética, la cual revierte en cómo financiamos después, cuando prestamos el dinero”, concluye.

En la gobernanza y en la transparencia está la clave de su crédito. “Nosotros tenemos un consejo de administración elegido por nuestra base social; es decir, cada una de las estructuras organizadas de nuestro gobierno es en cierto modo responsable de nombrar al director responsable y a toda la estructura”. “No se vota en función de la capacidad económica, y además nuestros consejeros no cobran por pertenecer al consejo”. En ese sentido, “no hay gobierno externo a nuestra entidad”. En cuanto a transparencia, “publicamos a quién financiamos y sobre qué proyecto. En este aspecto somos totalmente transparentes”.

De cara al futuro, “seguiremos potenciando la economía social”, una actividad que en España representa el 10% del Producto Interior Bruto. “Y queremos hacerlo apoyando las nuevas iniciativas empresariales que tomen conciencia de este aspecto”. “Seguiremos hablando con emprendedores sensibles a trabajar colectivamente, además de con sectores con los que ya veníamos manteniendo diálogo, como la educación o la agricultura”. Y es que “las empresas que trabajamos promoviendo la solidaridad interna dentro de la propia entidad y con la sociedad, favoreciendo la cohesión social, la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, la inserción de personas en riesgo de exclusión social, y la independencia frente a los poderes públicos hemos demostrado que somos mucho más resilientes que el resto”.