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<b>PASCUA CONTEMPLATIVA</b>. Los Negrales (Madrid) 12-16 de Abril de 2006
“Han sido unos días en los que he podido experimentar
cómo la iniciativa sigue siendo de Dios.
Cada día se nos orientaba acerca del misterio Pascual.
Ricas exposiciones que nos ayudaban
a pensar, orar y llevar esas ideas a nuestra vidas.
Un trabajo personal acompañado y compartido
que nos hacía llegar al objetivo de la Pascua: Intimidad con Dios
desde el Encuentro y la Comunión con los hermanos”
Este testimonio, -uno entre otros-, nos da el sentido y a la vez el resumen de la Pascua Contemplativa.
1.- Su porqué.
Dentro de nuestra Pastoral, y en el marco de las diversas modalidades de vivir la Pascua, advertimos que había jóvenes y adultos, no tan jóvenes, que tenían en su haber experiencias de diversas Pascual: Con su comunidad cristiana parroquial, con su Grupo de vida, Misioneras en pueblos sin sacerdote, de Discernimiento Vocacional a la luz del misterio de Cristo... Pero advertimos también que algunos y algunas jóvenes echaban de menos una Pascua con muchos momentos de soledad, con mucho silencio y con mucha oración personal. En el año 2002, se dio respuesta a esa necesidad y se programó la primera Pascua Contemplativa.
2.- Su objetivo.
El objetivo de esta Pascua es vivir la intimidad con Dios en el Centro de su Ser. Intimidad con Dios, que nace del deseo de unirse a Él. Vivir la intimidad con Cristo, Crucificado-Resucitado, hasta llegar a nuevas profundidades. Vivir la intimidad con la Familia humana. No es posible desear a Dios y contemplar a Cristo en el Misterio Pascual sin incluir a todos los seres humanos, especialmente a los más necesitados.
3.- Sus características.
La personalización es sin duda la primera característica de la Pascua Contemplativa. Se evitan las reuniones por grupos para dar más tiempo a la profundización personal en clima de soledad.
El silencio es otra característica. Silencio para favorecer la intimidad con Dios en la reflexión y en la oración. Dentro del marco del silencio, se da mucho relieve al gran silencio que se inicia prácticamente la noche del Jueves Santo y se prolonga hasta la Comida del Sábado Santo.
El compartir, que también existe, se lleva a cabo en las Revisiones del día y en algunas celebración de las que luego hablaremos.
4.- Sus dinámicas.
La oración de la mañana. Laudes. Preparadas en un cuadernillo que se distribuye a cada participante, son recitadas en particular. Cada salmo va precedido de un comentario para la meditación.
La orientación del día, justamente después del desayuno, en la que se ofrecen las claves de la espiritualidad del misterio que se va a celebrar y se reparten los subsidios que han de servir de guía para la jornada.
El cuadernillo de materiales propio para cada día, con tres apartados bien definidos: “Para pensar”, Para orar” y “Para la vida”. En su recorrido, siempre en silencio, se invierte toda la mañana.
La guía de la Celebración litúrgica de las tardes y de la Noche Pascual. Guía que sirve para la preparación personal y la mejor vivencia del Misterio de cada día: La Cena del Señor, La Pasión y Muerte de Cristo, La Vigilia de Resurrección.
Otras Celebraciones. Además de las Celebraciones propuestas por la Liturgia, la Pascua Contemplativa ofrece otras tres: Getsemaní y los Getsemanís, para el Jueves noche; La Cruz y las cruces, para el Viernes noche y el Sepulcro y los sepulcros, para la primera hora del Sábado mañana. En ellas, se da mucho margen para la creatividad y para el compartir.
El día de Desierto. La Pascua Contemplativa propone el Sábado Santo, desde las 10.00 a las 17.00h como tiempo de desierto personal, a poder ser en medio de la naturaleza, fuera del lugar en el que se celebra la Pascua. Desierto que evoca los elementos mistéricos del Sábado Santo. Solos, sin nada, en pobreza ante el misterio de Cristo y ante la propia vida. Es un tiempo para contemplar “la ausencia” y para contemplar y estar cerca de la Madre Dolorosa.
El acompañamiento personal. Es una dinámica diaria. Los animadores de la Pascua Contemplativa, –sacerdotes, por lo general-, dialogan con cada uno de los participantes y siempre con los mismos. Revisión, análisis de lo vivido, experiencias más significativas, nuevos hallazgos espirituales, y orientación de cara a lo que se ha de vivir.
La Revisión de la Jornada y perspectivas para la celebración de cada noche. Suele llevarse a cabo después de cenar en asamblea del grupo.
La música. Cada día, inmediatamente después de comer o de cenar se reúnen los músicos y parparan las canciones que se han de cantar en las celebraciones. Canciones ya conocidas, para evitar el ensayo y favorecer así el silencio.
5.- La Pascua de este año 2006.
Con este sentido y con estas dinámicas se ha celebrado esta Pascua Contemplativa en Los Negrales. Dos Claretianos: Luís Ángel de las Heras y Ángel Esteban. Diez participantes laicos, venidos de diversas comunidades cristianas, insertas en la Pastoral Claretiana: Antiguos Alumnos del Colegio Claret de Madrid; Comunidad de Madrid-Ferraz; Comunidad de Segovia; y una joven religiosa de la Congregación de las Hijas de Cristo Rey. Sus nombres: Alfonso, Antonio, Eduardo, Elena, Elisa, Eusebia, Javier, Ricardo, Sara, Soledad. El Domingo por la mañana se incorporó María, también de la Comunidad de Antiguos del Claret de Madrid.
En las celebraciones litúrgicas participaron además tres Seminaristas Claretianos, residentes en Colmenar Viejo, que estaban haciendo una semana de Ejercicios Espirituales como preparación para su Profesión Perpetua (día 29 de Abril de este mismo año): Gregory, de Nigeria; Pierre, de Camerum y Efrén, de Filipinas.
La experiencia, por lo que los mismos participantes han testimoniado ha resultado extraordinaria. Experiencia que, según ellos, hay que dar a conocer más y más.
¡ALELUYA! Ángel Esteban cmf.