Arranca la 45 Semana de Vida Religiosa acercando la misericordia a la vida eclesial

Agradecimiento. Fue la palabra más oída en la jornada de apertura de la 45 Semana de Vida Religiosa. Primero de parte de su organizador, el P. Carlos Martínez Oliveras, CMF. Por la extraordinaria respuesta obtenida en la cantidad de público asistente, por la presencia de Monseñor Carlos Osoro y su palabra de aliento a la vida religiosa, así como de María Rosario Ríos, Presidenta de CONFER, el P. Gonzalo Tejerina y el P. Mathew Vattamattan, CMF, Presidente del Instituto Teológico de Vida Religiosa y Superior General de la congregación de los Misioneros Claretianos.

En plena celebración del Año Santo, el tema central que lo convoca, la misericordia, se trasladó a las conferencias del Arzobispo de Madrid y del jesuita Antonio Spadaro. El primero, desde su mirada a la Iglesia más local, acercó la misericordia a la vida eclesial y, a la vista de los religiosos que llenaban el auditorio comenzó diciendo: “sobran mis palabras. En ningún lugar como en la Vida Religiosa se expresa más bellamente la misericordia en la Iglesia”. Para después añadir: “La misericordia es el único criterio de la reforma eclesial. Así lo presenta el Papa”. Y del Papa Francisco habló seguidamente Antonio Spadaro, ampliando las miras a la Iglesia más universal. Comenzó haciendo una confesión: era la primera conferencia que daba en castellano. Fue una hora en que desarrolló la manera en la que Bergoglio entiende la misericoridia, experimentándola desde su conocimiento de profundo pecador.