Con un proyecto que busca restaurar parte de los bosques autóctonos de la zona de Cazale, en Haití
Se encuentra usted aquí
Del lado de los Derechos Humanos y la justicia en Honduras
La situación en Honduras se complica por momentos. Durante la noche del 22 de febrero, la Parroquia Nuestra Señora del Pilar de los Misioneros Claretianos en Arizona (Atlántida-Honduras) vivió momentos difíciles después de conocer la detenciíon injustificada y posterior ingreso en el centro penal de Tela de Doña Aquilina Guerra, acusada de fabricar armas. Poco después de conocer la noticia, el Superior Provincial de los Misioneros Claretianso en Centroamérica, Ismael Montero, lanzaba un comunicado en el que recogía que "a Doña Aquilina la conocemos de siempre por ser experta en cocina y elaborar el pan. Exigimos la libertad de ella y de todos los apresados injustamente".
Unos hechos que se enmarcan dentro de la crisis política que atraviesa el país centroamericano después de que el pasado 26 de noviembre se realizaran unas elecciones fraudulentas. Desde entonces, y como consecuencia de las protestas pacíficas y ciudadanas, se calcula que la represión ha dejado más de 40 asesinatos y decenas de presos políticos y criminalizados judicialmente.