En el proceso del Sínodo de los jóvenes

Después de todo el camino de preparación, tras la celebración del Sínodo y la publicación de su Documento final y de la Exhortación del Papa Francisco “Christus Vivit”, del 19 al 22 de junio se ha celebrado en Roma un “Forum Internacional de jóvenes”: 350 participantes de 18 a 29 años de todo el mundo para poder discernir y discutir sobre todo lo que está suponiendo este proceso. Este Forum aparece en las cuatro primeras fotos de abajo, y se puede rastrear en las redes sociales con el hashtag #YouthForum19.

Para preparar este encuentro y designar a dos representantes españoles,  el Departamento de Juventud de la Conferencia Episcopal Española convocó un Seminario Nacional de Jóvenes en Valladolid, con 40 jóvenes vinculados a Diócesis, Congregaciones y Movimientos. Entre ellos, Raul Santiago Prieto, de Zamora, que cuenta aquí su experiencia (a la que responden las tres fotos inferiores):

Cuando te llega la propuesta de vivir un fin de semana, el 1 y 2 de junio, con cuarenta jóvenes de diferentes puntos de España, donde hablaremos, y trabajaremos, te da respeto: un Seminario Nacional de Jóvenes.

Pero desde la llegada todo prometía. Una vez que entrabas por la puerta, veías las miradas de todos ellos, no hacían falta palabras para saber que nos entendíamos, para notar la presencia del Cristo en la sala. Unas breves ponencias y la exposición del Santísimo, junto con la presencia de Mons. Carlos Escribano -obispo responsable del Departamento de Juventud de la Conferencia Episcopal y padre sinodal-, ponían inicio a este Seminario.

Durante el fin de semana, trabajamos cuatro propuestas importantes: el primer anuncio, el acompañamiento, el discernimiento y cómo generar procesos formativos. Estos temas fueron introducidos previamente por ponentes, y trabajados en cuatro grupos que rotábamos por los temas en una especie de “Work- Café” sin café, aunque aprovechábamos los ratos de descanso para tomarlo. En los grupos creamos un decálogo, gracias a un diálogo constante entre todos.

Tras una jornada intensa, todos disfrutamos de un rato por Valladolid, donde se crearon lazos de amistad grandes.

En la jornada del domingo, contamos con la presencia del Secretario General de la Conferencia Episcopal Española, Mons. Luis Argüello y obispo auxiliar de Valladolid, que nos acompañó en el inicio del día animándonos a seguir trabajando para creer juntos en la iglesia. Muy agradable, un obispo “guay”, como habíamos propuesto uno de los grupos previamente en nuestros debates.  Tras ello, concluimos los trabajos por grupos y los secretarios decidieron juntos los diez puntos importantes de cada línea de trabajo. Finalmente entre todos debatimos sobre ello y concluimos con la celebración de la Eucaristía.

Ahora cada uno ha vuelto a su realidad, donde intentará compartir lo vivido allí. Yo, con el Espíritu renovado y con ganas de compartir todo. Cada uno de nosotros además, hemos recogido una experiencia única, amigos, ideas… y todo lo que se pueda imaginar, que hizo de este Seminario algo especial. Nosotros los jóvenes seguimos en contacto, compartiendo para crecer.