Foro político de Alto Nivel sobre la Agenda ODS2030: Satisfechos con lo logrado pero… necesitamos mayor velocidad

En el año 2000 se aprobaron los Objetivos de Desarrollo del Milenio como punto, aparentemente final, de un proceso que comenzaba en la Cumbre de la Tierra (1992) en Río. Esta aprobación pareció que iba a ser algo definitivo para cambiar el mundo: los países del Norte se comprometían con los del Sur para ayudarles en su desarrollo. La crisis que comenzó en Lehman Brothers en 2008 y se extendió a todo el mundo con una densidad inesperada, enseñó que estábamos lejos de haber encontrado la senda adecuada para solucionar los problemas del mundo. Era cuestión de seguir buscando. Fueron la Unión Europea y los países de Latinoamérica los que más impulsaron una reflexión más en profundidad sobre las razones últimas de la crisis que iba siendo considerada, cada vez más, como una crisis planetaria sin precedentes.

Un laborioso proceso de diálogos entre países y la introducción, por primera vez, de la Sociedad Civil en el estudio de la realidad y en la elaboración de las conclusiones, dieron lugar a algo que muchos recibieron con escepticismo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Cuando en septiembre de 2015 la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Agenda con el lema que “Nadie quede atrás”, había muchas dudas sobre el futuro de los ODS 2030 (Objetivos de Desarrollo Sostenible). Muchos interrogantes transitaban por debajo de las alegrías expresadas y de una presentación mediática en forma nunca vista para un documento de la ONU. Pues bien, después de cuatro años de aquello, en medio de un mundo que avanza y retrocede, la fortaleza de lo que podríamos denominar “horizonte Agenda 2030” es mayor y está más reforzada que en su comienzo.

Algo que desde el comienzo comenzó a cambiar en la ONU con la Agenda 2030 fue la participación de la Sociedad civil. La ONU pasó de ser una organización de “las potencias vencedoras” de la II Guerra mundial, a abrirse a 193 Estados Miembros (2011). Era una apertura importante pero el mundo seguía avanzando y la complejidad de los análisis y las soluciones exigía que los representantes políticos reconociesen que sin la Sociedad Civil no se podía avanzar en la búsqueda de una solución. El proceso de elaboración de la Agenda para el Desarrollo Sostenible contó con expertos del más alto nivel en los temas tratados. Los paneles preparatorios de las discusiones políticas eran verdaderos seminarios de estudio sobre sobre los temas a decidir. La incorporación de las compañías, grandes corporaciones y filántropos a la implementación de la Agenda de ODS2030 fue creciente desde su aprobación en la Asamblea General.

El HLPF, siglas en inglés de Foro Político de Alto Nivel, para la supervisión y el cumplimiento de la Agenda se ha ido descubriendo como un instrumento increíblemente potente para la concienciación de los países y la búsqueda del rigor y el diálogo. A cuatro años de la aprobación de los ODS 2030, la próxima Asamblea General de las Naciones Unidas va a abordar el grado de cumplimiento de los ODS y el trabajo del HLPF en el seguimiento del mismo. Estas dos semanas pasadas, el HLPF en la ONU ha revisado el cumplimiento de 6 ODS y se ha cuestionado a sí mismo. La evaluación final ha sido muy positiva pero hay que mejorar algunas cosas: incrementar la participación de la sociedad civil; mejorar los sistemas estadísticos y de medición; realizar encuentros por zonas que preparen las sesiones en Nueva York; mejorar las presentaciones voluntarias de los países de manera que sean sobre la totalidad de la Agenda y con estadísticas contratables desagregadas y compatibles; buscar la forma en que las intervenciones de países y grupos de la sociedad civil cuenten con más tiempo y más posibilidad de diálogo; buscar mayor implicación de las políticas y economías de cada país y cada zona en la implementación de los ODS2030; y buscar la forma para dar más y mejor a conocer los ODS y las conclusiones de cada uno de los HLPF.

En definitiva, unas sesiones de análisis critico y positivo sobre la Agenda 2030 y el instrumento HLPF para su seguimiento. La Agenda de ODS2030 es, más que nunca, el horizonte que está juntando los esfuerzos de todos para “Transformar nuestro mundo “, “No dejando a nadie atrás”.

Miguel Ángel Velasco cmf

Presidente de Fundación PROCLADE y Secretario de Solidaridad y Misión

Aquí os dejamos también tres artículos sobre nuestra presencia en el foro que publicamos en la web de Fundación PROCLADE. Podéis descargarlos aquí, aquí o aquí.